Los edulcorantes artificiales se han considerado una solución a los problemas causados por la ingesta de azúcar. Carecen de calorías y se anuncian como una alternativa saludable al jarabe de maíz de alta fructosa y al azúcar. Sin embargo, los estudios han demostrado que consumir edulcorantes artificiales puede hacerte ganar peso más rápidamente que si consumieras azúcar normal. Los edulcorantes artificiales ralentizan tu metabolismo y, en última instancia, te incitan a comer más. Los tres ingredientes principales de los edulcorantes artificiales -aspartamo, sacarina y acesulfato potásico- se han relacionado con el cáncer, así como con la enfermedad de Alzheimer, el autismo, el síndrome de fatiga crónica, el lupus, la esclerosis múltiple y la enfermedad de Parkinson.
Yo también los utilizaba, pensando que eran mejores que el azúcar, ya que es lo que me enseñaron en la escuela cuando estudiaba para ser dietista. Si los dietistas los utilizan y recomiendan, no es de extrañar que creamos que son buenos para nosotros, ¿verdad? Pues bien, como demuestran repetidamente las investigaciones, puede que no haya buenas razones que apoyen la idea de que los edulcorantes artificiales son beneficiosos para nosotros. No son ni mucho menos tan saludables como se anuncian en la televisión, porque desordenan nuestro metabolismo, causan estragos en nuestro intestino, alimentan la adicción al azúcar, son peligrosos con varios efectos secundarios y elevan nuestros niveles de azúcar en sangre.
Edulcorantes artificiales comunes
He aquí los edulcorantes artificiales más populares (y peligrosos) del mercado actual.
- Aspartamo (Equal, NutraSweet ) Actualmente se utiliza en más de 6.000 alimentos y bebidas de consumo, y en más de 500 medicamentos con y sin receta. ¡Se esconde en lugares que no esperamos! Como el aspartamo no es termoestable, suele encontrarse en bebidas y alimentos que no se han calentado. Entre los efectos secundarios habituales del aspartamo se incluyen dolores de cabeza, migrañas, trastornos del estado de ánimo, mareos y episodios de manía. Compuestas de fenilalanina, ácido aspártico y metanol, estas sustancias pueden permanecer en el hígado, los riñones y el cerebro durante bastante tiempo.
- Sucralosa (Splenda) La sucralosa es 600 veces más dulce que el azúcar. La sucralosa, derivada del azúcar, se introdujo originalmente como sustituto natural del azúcar. Sin embargo, en realidad, es un derivado clorado de la sacarosa. Sí, el cloro, una de las sustancias químicas más tóxicas del planeta. A pesar de su contenido en cero calorías, Splenda desencadena un aumento de los niveles de insulina, que indican al cuerpo que retenga las reservas de grasa o que almacene aún más grasa en tu hermoso cuerpo
- Acesulfamo K (ACE K, Sunette, Equal Sweet ‘n Safe ) Compuesto por una sal de potasio que contiene cloruro de metileno, el acesulfamo K se encuentra habitualmente en chicles sin azúcar, bebidas alcohólicas, caramelos e incluso yogures azucarados. A menudo se utiliza en combinación con el aspartamo y otros edulcorantes no calóricos. El ACE K es termoestable y se encuentra habitualmente en alimentos muy procesados y productos de panadería. El cuerpo humano no puede descomponerlo y se cree que afecta negativamente al metabolismo.
- La sacarina (Sweet ‘N Low, Sweet Twin) es el principal edulcorante de los medicamentos infantiles, incluidas las aspirinas masticables, el jarabe para la tos y otros medicamentos de venta con y sin receta. Se cree que la sacarina contribuye a la fotosensibilidad, las náuseas, las molestias digestivas, la taquicardia y algunos tipos de cáncer.
¿Dónde se esconden estos edulcorantes artificiales?
La gente suele sorprenderse de la frecuencia con que se incluyen edulcorantes artificiales peligrosos en alimentos preparados, medicamentos y bebidas. He aquí algunos ejemplos sorprendentes de dónde comprobar si existen los edulcorantes peligrosos antes mencionados.
| Pasta dentífrica y colutorio | Vitaminas masticables para niños |
| Jarabe para la tos y medicamentos líquidos | Chicle |
| Aguas y bebidas sin calorías | Bebidas alcohólicas |
| Aliños para ensaladas | Yogur helado y otros postres helados |
| Caramelos | Productos de panadería |
| Yogur | Cereales para el desayuno |
| Aperitivos procesados | Zumos y bebidas de fruta “light” o dietéticos |
| Carne preparada | Chicles de nicotina |
¿CUÁLES SON TUS ALTERNATIVAS?
Entonces, ¿cuáles son tus opciones cuando eres goloso? odos los edulcorantes naturales -como el sirope de arce, el azúcar de coco, la estevia, los purés de fruta y la miel cruda- son sustitutos estupendos y saludables.
| Miel cruda (1 cucharada – 64 calorías) | Stevia (0 calorías) |
| Dátiles (1 Dátil Medjool – 66 calorías) | Azúcar de coco (1 cucharada – 45 calorías) |
| Sirope de arce (1 cucharada – 52 calorías) | Melaza negra (1 cucharada – 47 calorías) |
| Puré de plátano (1 taza – 200 calorías) | Jarabe de arroz integral (1 cucharada – 55 calorías) |
Lleva contigo paquetes de estevia (HOJA DULCE PURA o GOTAS) para no tener que recurrir a los edulcorantes artificiales que te proporcionan restaurantes y cafeterías.
Llevar una vida sana no significa que tengas que renunciar por completo a los dulces; sólo significa que tienes que sustituir los azúcares refinados y los edulcorantes artificiales poco saludables por estos edulcorantes naturales. Cada uno de ellos tiene el mejor uso, y será necesario modificar algunas recetas. Explora y encuentra el edulcorante natural que más te guste.
